El codo es la articulación que une el brazo con el antebrazo, es decir, es la pieza central y parte importante en el eje de movimiento de nuestros brazos, permite la flexión y estiramiento de las extremidades superiores. Además, es el punto de origen de los tendones extensores y flexores de la mano.
Está conformado por un conjunto de articulaciones entre el húmero, radio y cúbito. Al igual que pasa con todas las articulaciones, aunque está hecha para un uso continuo, esto no lo hace menos propenso a distintas lesiones producidas por desgaste. También, es una de las articulaciones más implicadas en caídas y accidentes ya que por reflejo nuestros brazos siempre reaccionan para cubrir la parte superior del cuerpo por lo que son especialmente vulnerables a traumatismos.
Codo de tenista
Llamada no tan comúnmente “epicondilitis lateral”, es una enfermedad provocada por el uso excesivo. Esta es una inflamación de los tendones que unen los músculos del antebrazo con la parte exterior del codo. Los músculos y los tendones del antebrazo se dañan debido al uso excesivo y repetitivo de los movimientos. Esta afección produce dolor y sensibilidad en la parte exterior del codo.
A pesar de su nombre, otros deportes ajenos al tenis pueden desarrollar “codo de tenista”, e incluso, personas ajenas al deporte pueden terminar padeciendo de este problema si sus trabajos constantemente les exigen el uso de los codos, esto, de igual manera genera un desgaste.
¿Cuáles son sus causas?
Cuando se usan de manera muy reiterada los músculos del antebrazo fijados al hueso –llamados tendones- por la parte externa del codo pueden desarrollar pequeños desgarros, lo que, con el tiempo, produce irritación y dolor en el lugar donde el tendón se fija al hueso.
En concreto, pueden provocar desgarros en el tendón la práctica reiterada de las siguientes actividades o movimientos:
- Jugar con mucha frecuencia al tenis u otros deportes de raqueta. El revés es el golpe más común que provoca síntomas, pero las causas pueden ser múltiples: desde la falta de calentamiento previo al uso de una raqueta demasiado pesada.
- Cualquier actividad que involucre torsión repetitiva de la muñeca, como usar un destornillador o, incluso, estrechar manos de manera continuada.
- Estrenar una moto -estar acostumbrándose al manejo del freno y el embrague- o realizar rutas largas en este vehículo.
- Uso constante del ratón y/o el teclado del ordenador.
Recomendación
Para tratar este tipo de problemas que afectan una articulación tan importante es necesario un pronto diagnóstico, por lo general, si se tratan a tiempo, todas estas complicaciones se pueden solucionarse, en casi todos los casos lo primero que se busca es reducir la inflamación de los músculos y tendones para luego restringir la movilidad de la articulación, esto es fundamental para evitar una recaída en la lesión y no empeorarla.